El Internet de las cosas (IoT) ha transformado las industrias al conectar dispositivos para recopilar e intercambiar datos. Partiendo de los cimientos de IoT, la Inteligencia Artificial de las Cosas (AIoT) integra la IA para aportar inteligencia y adaptabilidad a estos sistemas. A medida que las empresas adoptan tecnologías avanzadas en aras de la eficiencia, es crucial comprender las diferencias entre IoT y AIoT y sus implicaciones para aplicaciones como la gestión de dispositivos IoT, la supervisión industrial y la computación de borde en ese momento.
Índice
¿Qué es IoT (Internet de los objetos)?
IoT hace referencia a una red de dispositivos conectados equipados con sensores que recopilan y comparten datos a través de Internet.
- Características principales: Dispositivos IoT permiten la supervisión en tiempo real y la automatización de los procesos, apoyándose en plataformas centralizadas para el análisis de los datos.
- Aplicaciones: Desde los hogares inteligentes y los dispositivos vestibles hasta las soluciones industriales de IoT, la IoT ha revolucionado sectores como la fabricación, la sanidad y la logística. Por ejemplo, la supervisión y el control de dispositivos IoT permiten agilizar las operaciones en todos los ecosistemas conectados.
¿Qué es la AIoT (Inteligencia Artificial de las Cosas)?
La AIoT mejora la IO incorporando inteligencia artificial a los sistemas conectados, lo que permite a los dispositivos analizar datos en tiempo real y tomar decisiones inteligentes de forma autónoma.
- Características principales: La AIoT aprovecha el análisis predictivo para proporcionar perspectivas que van más allá de la mera recopilación de datos, permitiendo sistemas inteligentes y autónomos.
- Aplicaciones: Algunos ejemplos Soluciones AIoT para vehículos autónomos, fábricas inteligentes y computación de borde en aplicaciones industriales, donde las decisiones en tiempo real se toman localmente con la recopilación y el análisis de datos.

Diferencias clave entre IoT y AIoT
- Procesamiento y análisis de datos
- IoT: Depende de plataformas centralizadas como las plataformas IoT basadas en la nube para recopilar y procesar los datos. Los datos se envían a un servidor remoto, lo que conlleva posibles problemas de latencia.
- AIoT: Incorpora computación de borde, lo que permite a los dispositivos procesar los datos localmente. Esto reduce la latencia y permite una toma de decisiones instantánea, fundamental para aplicaciones en tiempo real como los vehículos autónomos o la robótica industrial.
- Automatización e inteligencia
- IoT: Admite la automatización básica basada en reglas. Por ejemplo, puede activar una notificación cuando se cruza un umbral específico en un entorno industrial.
- AIoT: Aprovecha la IA para ofrecer una automatización inteligente. Las soluciones AIoT pueden adaptarse dinámicamente a patrones cambiantes, como la optimización de rutas logísticas o la detección de anomalías en sistemas complejos.
- Escalabilidad y eficiencia
- IoT: El escalado de los sistemas IoT suele plantear retos como el aumento del consumo de ancho de banda y la reducción de la eficiencia, especialmente cuando se gestionan grandes cantidades de datos en tiempo real.
- AIoT: Escala eficazmente procesando los datos en el borde, minimizando las necesidades de ancho de banda y manteniendo la eficiencia. AIoT prospera en aplicaciones a gran escala como las ciudades inteligentes y la gestión de dispositivos IoT industriales.
- Aplicaciones y casos de uso
- IoT: Centrado en aplicaciones de supervisión y control, como dispositivos domésticos inteligentes y supervisión de dispositivos IoT para equipos.
- AIoT: Diseñado para aplicaciones inteligentes, predictivas y autónomas. Algunos ejemplos son el mantenimiento predictivo en la fabricación, la geovalla para la gestión de flotas y el control inteligente del tráfico en zonas urbanas.
IoT vs AIoT

Ventajas de la AIoT frente a la IoT tradicional
- Mayor eficacia y automatización La AIoT elimina ineficiencias procesando datos en tiempo real directamente en los dispositivos, lo que permite respuestas instantáneas y precisas. Esto convierte a la AIoT en una solución ideal para escenarios complejos como la gestión del tráfico en tiempo real o la optimización de la cadena de suministro en consecuencia.
- Mejora de la toma de decisiones La IoT aprovecha el aprendizaje automático y el análisis predictivo para transformar los datos brutos en información procesable. Por ejemplo, en las aplicaciones industriales de la IoT, la AIoT puede predecir los fallos de los equipos, reduciendo el tiempo de inactividad y los costes de mantenimiento.
- Ahorro de costes y escalabilidad Al reducir la dependencia de la computación centralizada en la nube, la AIoT disminuye los costes operativos. Su escalabilidad favorece a sectores como la sanidad, la fabricación y la logística, en los que las operaciones a gran escala requieren una gran eficiencia.
- Seguridad avanzada AIoT mejora la seguridad con algoritmos inteligentes capaces de detectar y mitigar las posibles amenazas a la ciberseguridad. La IoT por sí sola se basa en medidas de seguridad básicas, que sin embargo pueden no ser suficientes en entornos de alto riesgo como las redes inteligentes o las soluciones financieras de IoT.
- Apoyo a las tecnologías de vanguardia La IAoT se integra a la perfección con tecnologías como la 5G y la computación de borde, potenciando las aplicaciones de próxima generación. Algunos ejemplos son los sistemas autónomos, la robótica impulsada por la IAoT y la supervisión industrial remota.
La AIoT trasciende el IoT aportando inteligencia, toma de decisiones en tiempo real y escalabilidad a los ecosistemas conectados. Es el futuro de la tecnología IoT, que ofrece ventajas inigualables a las industrias que buscan innovación.
Preguntas frecuentes sobre AIoT e IoT
IoT (Internet de los objetos)
Enfoque central: El núcleo del IoT es la conectividad de los dispositivos y la recopilación de datos, pero no implica necesariamente un procesamiento o análisis de datos complejo.
Aplicaciones: El IoT se utiliza ampliamente en los hogares inteligentes, las ciudades inteligentes, la vigilancia de la salud y otros campos.
IIoT (Internet industrial de las cosas)
Enfoque central: Los sistemas IIoT suelen requerir una mayor fiabilidad, seguridad y rendimiento en tiempo real porque suelen estar relacionados con operaciones industriales críticas.
Aplicaciones: La IIoT se utiliza habitualmente para mejorar la eficiencia de la producción, la supervisión de los equipos, el mantenimiento predictivo, la optimización de la cadena de suministro, etc.
AIoT (Inteligencia Artificial de las Cosas)
Enfoque central: La AIoT no sólo incluye la conectividad de los dispositivos y la recopilación de datos, sino que también implica el uso del aprendizaje automático, el análisis de datos y otras tecnologías de IA para analizar los datos, logrando así una toma de decisiones y una optimización automatizadas.
Aplicaciones: La AIoT se está aplicando a diversos campos como los sistemas de transporte inteligentes, la fabricación automatizada, la sanidad inteligente, etc. Proporciona servicios y soluciones inteligentes más avanzados.
La AIoT (Inteligencia Artificial de los Objetos) afecta a la privacidad y seguridad de los datos de la IIoT (Internet Industrial de los Objetos) de varias maneras significativas.
Integración e interoperabilidad:
Los sistemas AIoT a menudo necesitan integrarse con dispositivos y sistemas IIoT para ofrecer soluciones integrales.
Esta integración requiere una comunicación y un intercambio de datos sin fisuras, lo que puede introducir en consecuencia nuevos retos en materia de seguridad y privacidad.
Intercambio de datos y colaboración:
En los entornos IIoT, el intercambio de datos entre diferentes dispositivos y sistemas es crucial para la eficacia de las operaciones.
Los sistemas AIoT pueden facilitar este intercambio de datos, pero deben garantizar que se realiza de forma segura para evitar el acceso no autorizado o el uso indebido de los datos.
Cumplimiento de la normativa:
Los sistemas IIoT operan a menudo en industrias muy reguladas, como la fabricación y la sanidad.
Los sistemas AIoT deben cumplir estas normativas para garantizar la privacidad y la seguridad de los datos, lo que puede suponer un reto debido a la complejidad y a la naturaleza interconectada de estos sistemas.
Un ejemplo concreto de aplicación de la IAoT en una ciudad inteligente es un sistema de iluminación inteligente. Los sensores IoT pueden detectar la presencia de personas y vehículos, y los algoritmos de IA pueden ajustar los niveles de iluminación en consecuencia. Esto no solo ahorra energía, sino que también mejora la seguridad al garantizar que las zonas estén bien iluminadas cuando sea necesario.
En resumen, una ciudad inteligente es un ejemplo clásico de aplicación de la IAoT, en la que las tecnologías de IA e IoT se integran a la perfección para mejorar la vida urbana, mejorar los servicios públicos y optimizar el uso de los recursos. Haga clic en Solución AIoT para saber más.
El futuro de la IAoT (Inteligencia Artificial de las Cosas) es brillante y está lleno de potencial de crecimiento e innovación. Se caracteriza por un rápido crecimiento, avances tecnológicos y aplicaciones emergentes en diversas industrias. Aunque persisten retos como la seguridad y la privacidad de los datos, las oportunidades de innovación e impacto social son inmensas. Con una inversión y una colaboración continuas, la IAoT tiene el potencial de transformar nuestra forma de vivir, trabajar e interactuar con el mundo.